viernes, 6 de abril de 2018

"Que falta que me hacés", 
por MIguel Caló y su Orquesta,
con la voz de Alberto Podestá.

A la Historia nos la cuentan, la leemos. A veces la estudiamos. 
Por momentos pensamos que la conocemos. Nombres, fechas y fotos. 
Todo aquello que justifique o compruebe los hechos. Muchas veces hasta tomamos partido por lo sucedido hace siglos
 y hasta comprendemos u organizamos nuestro día de acuerdo e ello.

A la Historia también la escuchamos y así la incorporamos. 
Tal vez muchos no hayan vivido la época de los vinilos o cassetes, 
en los últimos años sólo se recuerdan los cds o los mp3 de ahora.
 Como que todo sucedió muy rápido. 
recuerdo cuando compré por el '91 el primer cd de mi vida, 
"Nadie sale vivo de aquí" de Andrés Calamaro 
o cuando mi mamá me compró el vinilo
 "Veinte éxitos de oro" de The Beatles.

Ahora mis vinilos y cds decoran el living de mi casa y acumulan polvo.
 En algunos cajones hay pilas y pilas de cassetes. 
Allí está la historia de mi vida o gran parte de ella. 
Versos y canciones que acompañaron mis momentos felices y los no tanto. Como diría Joaquín Sabina "la banda sonora de lo que viví". 
Amigos que ya no estan, novias que se fueron y algunas se casaron,
 viajes, fiestas, momentos de soledad, fotos viejas, etc.

Cuando escucho John Lennon, Joan Manuel Serrat 
o Luis Alberto Spinetta, entre otros, recuerdo y me emociono. 
Me pasó lo mismo cuando fui a escuchar uno de sus conciertos 
a un estadio o a un teatro. 
Mucho más si alguna vez le dí la mano o un beso.

Y también recuerdo y me emociono con el tango. 
Recuerdo a mi abuelo cantando algún tango de Gardel, 
la radio que escuchaban en los '70 mis viejos por la mañana,
 antes de llevarme al colegio, el "Winco" de casa, 
los discos de las grandes orquestas típicas que heredé
 y que ahora conviven con los de Creedence o Pink Floyd.
 Después de estos momentos vino el rock, la universidad, etc. 
Pero en los últimos 15 años regresó el tango a mi vida 
y ahora cuando lo escucho también recuerdo: 
amigos, amores, la milonga a la que fui ayer...

Mucha gente me dijo en estos últimos años que el tango
 es la cultura de los que nacimos por estas latitudes. 
Para mí es la Historia, la que me cuentan y la que leo.
 La que a veces estudio y pienso que conozco o comprendo. 
La que bailo todas las noches. Y la que me emociona.

Cuando escuché a Alberto Podestá por primera vez en "Mina Milonga"
, del Salón Canning, comprendí todo esto. 
Porque él estaba allí, cantando. 
Y él es parte de la Historia que todos conocemos, la escrita, la cantada. 
Y me emocioné profundamente. 
Y por un momento todos fuimos parte de la historia. 
La de todos nosotros."


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